Por The Associated Press

Tres de las explosiones tuvieron lugar en iglesias en plena celebración del Domingo de Resurrección, el día más importante dentro de los ritos de la Semana Santa.

 COLOMBO, Sri Lanka. Al menos 138 personas murieron y cientos resultaron heridas en seis explosiones casi simultáneas en tres hoteles y tres iglesias de Sri Lanka en Domingo de Pascua, según dijo a The Associated Press una fuente de seguridad, en el peor episodio de violencia en el país del sur de Asia desde el final de su guerra civil hace una década.

Las autoridades sospechaban que dos de las detonaciones eran obra de atacantes suicidas, indicó la fuente de seguridad, que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a hablar con la prensa. Entre los muertos había feligrese

Horas después de las seis detonaciones se registraron otras dos explosiones a las afueras de la capital, según el brigada Atapattu, portavoz del Ejército de Sri Lanka. Una de las detonaciones ocurrió en una casa de huéspedes de Dehiwala, donde murieron al menos dos personas. La octava fue en Dematagoda, a las afueras de Colombo. No había detalles sobre esta última.

La magnitud de los ataques recordaba a la guerra civil de Sri Lanka, que se prolongó varias décadas y en la que los Tigres de Tamil y otros grupos rebeldes atacaron el Banco Central, un centro comercial, un templo budista y hoteles populares entre los turistas.

Nadie se atribuyó la responsabilidad de las explosiones.

Los tres hoteles y una de las iglesias, el Santuario de San Antonio, en Colombo, eran frecuentados por turistas extranjeros. El Hospital Nacional recibió 47 cadáveres, incluidos los de nueve personas extranjeras, y atendía a más de 200 heridas, indicó el doctor Samindi Samarakoon, portavoz del centro.

Imágenes de televisión mostraban daños en los hoteles Cinnamon Grand, Shangri-La y Kingsbury.

El restaurante en la segunda planta del Shangri-La parecía destrozado por la explosión, con el techo y las ventanas reventados. Se veían cables sueltos colgando y mesas volcadas en el local, que quedó teñido de negro.

Un magistrado de la policía se encontraba en el lugar inspeccionando los cuerpos recuperados del restaurante. Desde fuera del cordón policial podían verse varios cuerpos cubiertos de sábanas blancas.

Más de 200 personas estaban siendo atendidas en el principal hospital de la capital, Colombo, según trascendió. Según EFE, además de las 138 muertes hay unos 400 heridos. 

Los edificios en los alrededores del santuario de San Antonio temblaron con el estallido, dijo Alex Agileson, que se encontraba en la zona. Varias personas heridas fueron evacuadas en ambulancias, señaló.

Las otras dos detonaciones golpearon la iglesia de San Sebastián en Negombo, una localidad de mayoría católica al norte de la capital, y la de Zion en la población oriental de Batticaloa. La iglesia de San Sebastián pidió ayuda en su página de Facebook.

La explosión arrancó el tejado, las puertas y las ventanas de la iglesia de San Sebastián. Imágenes de televisión del lugar mostraban a gente cargando a los heridos entre bancos manchados de sangre.

Las autoridades dijeron estar investigando. La policía acordonó de inmediato las zonas afectadas.

Las fuerzas de seguridad de Sri Lanka derrotaron en 2009 a los rebeldes Tigres de Tamil, que habían luchado para labrar un estado independiente para la minoría étnica tamil. Naciones Estima que unas 100.000 personas murieron en los 26 años de conflicto, aunque un comité de expertos dijo más tarde que solo en los últimos meses de violencia habían muerto unos 45.000 tamiles.

Tanto las tropas del gobierno como los Tigres de Tamil fueron acusados de graves violaciones de los derechos humanos.

s y huéspedes de hotel.